Los secretos de la fábrica de Caldo Natural Aneto
Hace unos días, a través de Madresfera, fuimos invitados a visitar la fábrica de Caldo Natural Aneto situada en Artés (Barcelona) y pudimos ver los secretos que guardan en ella, ¿quieres curiosear un poquito? Sigue leyendo...
Lo primero que quiero que pienses antes de empezar a leer estas lineas es: ¿cómo te imaginas la fábrica de Caldo Aneto? Todos en nuestra mente siempre nos hacemos una imagen virtual de lo que no conocemos y yo, en la mía, me imaginaba una fábrica enorme, moderna, con muchos camiones en la zona de carga y rodeada de campos de cultivo. Y… ¿pensáis que acerté? Puesssss… ¡no!
Cuando el navegador me dijo: ¡Ha llegado a su destino! y vi que estaba en medio de un polígono industrial, al lado de una pequeña nave en la que había una máquina dispensadora de caldos al lado de la verja, pensé: «Se ha equivocado el navegador y voy a llegar tarde».
Pero no se había equivocado, estaba ahí, delante de la fábrica de Aneto, esa fábrica que tenía tantas ganas de conocer. Así que accedí al parking, aparqué justo en la entrada y entré por una puertecita que ponía «Oficinas». Allí, en el mostrador de entrada, nos esperaba un cartel de bienvenida:
Allí nos recibió Josep Prat, Responsable de Comunidades de Caldo Aneto. Un chico joven y amable el cual nos acompañó durante toda la visita y aguantó con paciencia todas nuestras bromas y preguntas.
Sólo fuimos dos en esta visita, a última hora el resto de las invitadas se echaron para atrás, así que tuvimos una visita de lo más íntima, lo cual nos encantó ya que Eli (La Cuna de Eli) y yo ya nos conocemos y estuvimos como en casa.
Lo primero que hicimos, tras las presentaciones e ir al baño (ya sabéis que las mujeres somos muy meonas), fue subirnos al Jeep de Aneto e irnos a visitar uno de sus proveedores preferentes de Puerros y Coles.
Durante el camino, tanto Eli como yo aprovechamos para hacerle preguntas de casi todo tipo a Josep, pobrecito lo que tuvo que aguantar… Y una de las preguntas que le hice y que me encantó la respuesta fue: ¿Tenéis alguna variedad de caldo para bebés a partir de 6 meses hasta 1 año? Y la respuesta fue: ¡Si! Tenemos actualmente una gran variedad de caldos SIN SAL en el mercado y… a principios de 2020 saldrá una nueva variedad de CALDOS SUAVES sin sal, ni alérgenos como el apio ideales para los más peques! (Aluciné… ¡con lo perezosa que soy yo en la cocina… me han resulto la vida!)
A 12 minutos de la fábrica (8,6 kms) llegamos a los Huertos de «Món Sant Benet», una iniciativa de la Cooperativa Social Mans y Fundació Catalunya La Pedrera. Se trata de 3 hectáreas de huertos cultivados en 6 hectáreas de terreno cultivable en total, un proyecto que da trabajo a jóvenes en riesgo de exclusión social y con dificultades para encontrar faena, y les ofrece un lugar de trabajo, acompañamiento y formación en agricultura ecológica con el objetivo de que puedan insertarse más fácilmente en empresas del sector. De echo, nos comentó Josep que algunos de los jóvenes que salen de este proyecto, son entrevistados por Caldo Aneto para ser contratados por ellos.
Una curiosidad sobre los huertos que yo no conocía (no soy muy rural, por lo que es fácil sorprenderme) es que las 2 hectáreas de huerto están rodeadas de plantas aromáticas para ahuyentar a los insectos y poder prescindir de pesticidas. Es genial, ¿no?
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- Coles «Món Sant Benet»
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- Huerto «Món Sant Benet»
Al volver de ver los huertos ecológicos, nos «disfrazamos» con una bata blanca, gorrito y peúcs para poder acceder al interior de la fábrica, al corazón de Caldo Aneto.
Por higiene tuvimos que dejar tooodo fuera, incluido móvil así que no pudimos hacer fotografías del interior pero… #yolohevisto y me he quedado con todo, así que os lo explico por aquí:
Nada más entrar a la fábrica… ¡descubrí cual era la receta del día!
¡CALDO DE JAMÓN! Y es que toda la fábrica estaba envuelta en un olor a jamón exquisito.
En la primera sala en la que entramos descubrimos 5 enormes ollas de 3000 litros cada una (como las de la fotografía). En ellas introducen 3000 litros de agua y todo el alimento sólido que lleve la receta (que si no recuerdo mal eran 1000 kilos). La parte «sólida» va dentro de una especie de cesta metálica enorme y funciona como si fuese una especie de infusión (como una enorme bolsita de hierbas dentro de un enorme vaso con agua hirviendo). Ese agua con esos alimentos los hacen hervir más de tres horas y pasado este tiempo sacan el caldito a través de «tuberías» por la zona inferior de la olla.
En la sala contigua a donde estaban las ollas pudimos ver donde seleccionan las verduras a mano y donde les quitan «lo malo» para que el caldo salga lo más rico posible. A mano pesan cada día los ingredientes necesarios y los trituran en trocitos pequeños para así sacarle el máximo jugo al alimento.
Una de las cosas que más me sorprendió fue el tamaño de las zanahorias que estaban esperando al turno de la tarde y la calidad de las coles que tenían en la fábrica. También nos sorprendió ver unos grandes contenedores con garbanzos en remojo para la siguiente receta… ¿os imagináis cual podría ser la siguiente receta del día?
Josep nos explicó que entre una receta y otra se esmeran mucho en la limpieza para que no haya restos de trazas no deseadas y así no hayan alégrenos indeseados donde no toca…
Una de las cosas que tenía ganas de aprender es que hacían para tener un caldo 100% natural y que no se pusiese malo a los pocos días sin añadir conservantes, y es que, utilizan un proceso UHT, como el que se utiliza en la leche, para así matar todo microorganismo que pueda haber en el caldo y de esta manera aguante en perfectas condiciones durante meses y meses.
¿En que consiste el UHT? El proceso UHT es un tipo de esterilización rápida a altas temperaturas en el cual se cambia la temperatura del líquido varias veces pasando de 140º a 4º en cuestión de segundos.
IMPRESIONANTE, ¿verdad?
Después de conocer todos estos secretos, nos mostraron como filtran el caldo, como lo envasan y como se paletiza para poder llegar a los supermercados y a nuestras casas.
Y… finalmente, después de quitarnos el disfraz, nos hicieron sentir como en casa con una comida casera realizada especialmente para nosotras. ¿Que había en el menú? De primero un Caldito de Navidad con garbanzos, «Galets i Pilota» típico de Cataluña, junto a una ensalada de tomate riquísima, de segundo una carne exquisita y de postre fruta natural. ¡De rechupete!
Por cierto, no os penséis que nos vinimos con las manos vacías, ¡¡NO, NO!!
Nos trajimos algunos de los caldos más exquisitos para poder probar en casa:
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- Caldo Aneto ecológico Zanahoria y Cebolla
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- Caldo Aneto SUAVE Ecológico
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- Caldo Aneto Escudella y Arroz Negro
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- Caldo Aneto Navidad y crema de Marisco
De momento, de las variedades que nos trajimos, ya hemos probado el CALDO SUAVE de pollo con los peques de la casa y el de Navidad. Tengo unas ganas tremendas de probar la Crema de Marisco y el caldo especial para ARROZ NEGRO. ¡En cuanto los utilicemos os dejo receta por aquí!
Y después de todo lo que te ha explicado… ¿ya sabes cuales són los secretos de Caldos Aneto? Te enumero los más importantes:
- Trabajar con productos ecológicos de huertos km 0 y de primera calidad como los que utilizaríamos si tuviésemos huerto propio.
- No utilizar concentrados, ni conservantes, ni colorantes.
- Dedican el tiempo necesario a cada proceso y le dan calor humano.
- Ponen el corazón en todo lo que hacen.
Y si aun te has quedado con ganas de saber más cositas sobre esta humilde empresa, ahí van algunas curiosidades:
*CURIOSIDADES*
- Las ollas que utilizan en Caldo Aneto son 750 veces más grandes que las que utilizamos en casa.
- Aunque nos parezca que es una empresa de «toda la vida», Caldos Aneto se fundó en 2002 y… ¡Antes era una fábrica de Jamones! ¡JAMONES ANETO! se llamaba.
- En pocos meses lanzarán una nueva gama de caldos 100% productos ecológicos y sin sal (con alga wakame) especial para los peques de la casa.
- Tienen una tienda online donde puedes comprar sus caldos, ya que no están sus 28 variedades de caldos en todos los supermercados.
- Disponen de caldos de temporada como la crema de marisco, el fumet natural o el caldo de navidad que sólo están a la venta en fechas señaladas.
- También tienen caldos regionales típicos que no se encuentran en todas las comunidades autónomas (por ejemplo disponen de un caldo de Cocido Madrileño que solo se vende en Madrid o Caldo para paella Valenciana que sólo está Valencia).
- Todo el proceso es tan casero que hasta el diseño del Brik lo podríamos hacer en casa con la tipología de letra Comic Sans.
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